El día límite para declarar impuestos ya pasó. Si te ha quedado un saldo pendiente por pagar, probablemente estás sintiendo el peso de posibles multas y acciones por parte del IRS. No estás solo: muchas personas se encuentran en esta misma situación cada año. Pero hay buenas noticias: ¡no entres en pánico! Aunque es normal sentir estrés, existen soluciones y opciones para manejar esta situación de forma práctica.
En esta guía te explicamos qué hacer ahora que venció el plazo, qué opciones de pago ofrece el IRS, y cómo manejar el proceso para minimizar sanciones y encontrar una solución que se ajuste a tu situación —para que puedas respirar con más tranquilidad.
Ignorar una deuda de impuestos después de la fecha límite solo agrava el problema. El IRS no olvida lo que se le debe, y mientras más tiempo pase sin pagar, más graves serán las consecuencias.
Primero, se aplica una multa por “no pagar” (“failure-to-pay”) que equivale al 0.5% del saldo pendiente por cada mes o fracción de mes que no se pague, hasta un máximo del 25%. Además, se cobran intereses diarios sobre el saldo adeudado, lo que hace que la deuda siga creciendo.
Pero eso no es todo. Si no actúas, el IRS tiene autoridad para tomar medidas de cobro más serias, como:
Si no presentas tu declaración a tiempo, se te cobrará una multa por “no declarar” (“failure-to-file”) que es del 5% mensual, ¡mucho más alta que la multa por no pagar! Esta penalidad también puede acumularse hasta un máximo del 25%. Por eso, presenta tu declaración lo antes posible, aunque no puedas pagar la deuda completa. Existen programas en línea que te guían paso a paso, haciéndolo fácil y rápido.
Aunque no tengas el total, paga la mayor cantidad que puedas. Esto reduce los intereses y las multas, y demuestra buena fe ante el IRS. Además, puede ayudarte a negociar opciones de pago y evitar medidas de cobro más agresivas.
Llamar al IRS muestra que tienes la intención de resolver el problema, lo cual puede ayudarte a evitar complicaciones. Al contactarlos, podrás conocer las opciones de pago disponibles y posiblemente reducir las penalidades.
Tener tus documentos a mano facilita la conversación con el IRS y te ayuda a encontrar la mejor solución.
No poder pagar tus impuestos no significa que no haya salidas. El IRS ofrece varias alternativas para ayudarte a manejar la deuda:
Si te sientes abrumado, no dudes en buscar apoyo profesional. Abogados tributarios, agentes registrados (enrolled agents) y contadores públicos certificados (CPA) tienen experiencia en leyes fiscales y procedimientos del IRS. Pueden ayudarte a:
¿No quieres repetir esta experiencia el próximo año? Aquí tienes algunos consejos preventivos:
Recuerda: no estás solo. Si no pudiste pagar tus impuestos a tiempo, hay soluciones disponibles. Lo más importante es actuar cuanto antes. Comunícate con el IRS, explora tus opciones y empieza a trabajar en una solución manejable. Con pasos firmes y apoyo, puedes salir adelante y recuperar el control de tu situación financiera.